Monitorización de las señales de grupos de presión en central de detección

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Es importante transmitir las señales de las salas de bombas en cuadros de control, centrales de detección, etc. de manera que puedan tomarse las medidas adecuadas en caso de alarma.

monitorizar señales

Tanto la norma UNE EN 12845:2005+A2 como la norma UNE 23500:2012  hacen mención a las señales a transmitir. Suiendo en la norma de rociadores más extensa puesto que engloba las señales de grupos de bombeo, puestos de control, valvulería, etc.

A continuación se muestra la tabla incluida en la mecionada norma UNE EN 12845:2005+A2, en la que se observa que se distingue entre tipos de alarma tipo A y tipo B, siendo las alarmas tipo A las relacionadas con alarma de fuego y las tipo B las relacionadas con anomalías técnicas.

señales sala bombas UNE 12845

Las señales tipo A, son alarmas que implican un flujo de agua y que por tanto existe un punto de la instalación que está descargando agua o almenos que el grupo de presión está en marcha (flujo en sistema de rociadores de sala de bombas, grupo de presión en funcionamiento y flujo de agua en sistema de rociadores).

Las señales tipo B se trata de alarmas técnicas que requerirán nuestra atención, ya sea por válvulas que deben estar totalmente abiertas y no lo están, fallos o anomalías en el sistema que deben ser subsanadas, etc. Estas señales se repetirán en la central de forma óptica y acústica,  ya no solo porque lo exige la normativa, sino también para evitar averías en los grupos de presión, que por cierre de válvulas no se descargue el agua en los sistemas de extinción, etc.

Igual que en las señales tipo A, la norma UNE 23500:2012 también especifica la obligatoriedad de monitorizar este tipo de señales  (falta de tensión, bomba en NO automático, fallo de arranque, alarma agrupada por avería y orden de arranque) al sistema central de supervisión.

La monitorización de estas señales además de permitir cumplir con la normativa vigente evitará problemas que en algunos casos pueden crear grandes costes para los usuarios de la instalación.

Para concluir solo hacer la siguiente reflexión: El grupo de presión es el corazón que bombea la sangre a través de todos los vasos sanguíneos, que en nuestro caso, son las diferentes tuberías que alimentan las instalaciones de rociadores, bies, hidrantes, etc. Cualquier problema, avería o alarma que se detecte puede ayudar a prevenir daños mayores y es que si no funciona el grupo de presión en el momento preciso es como si todo el sistema de protección contra incendios fuera inexistente.

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