Una de las características principales de las cortinas corta fuego textiles es el hecho de descender en caso de incendio desde su posición retraída hasta su posición de funcionamiento, quedando totalmente ocultas hasta el momento en que se precisa de su uso como elementos de sectorización que son.
Se puede pensar erróneamente que el motor tubular que incorporan las cortinas es el elemento que las hace bajar. Sin embargo, se debe tener en cuenta que uno de los primeros efectos que tiene lugar cuando se produce un incendio en un local o nave es el corte del suministro eléctrico, y por tanto la función del motor se limita exclusivamente a la subida de la cortina hasta su posición retraída siempre y cuando se disponga de electricidad.
El sistema de descenso de las cortinas cortafuegos, comúnmente denominado Gravity Fail Safe, se rige por el principio físico de la ley de la gravedad o gravitación universal que el famoso científico Isaac Newton presentó en el año 1687.
Este sistema es de uso común y generalizado por todos los fabricantes del mercado, y se consigue mediante una regleta de cierre o contrapeso que asegura el cierre de las cortinas de forma segura sin necesidad de energía eléctrica.
Ahora bien, hay un detalle importante a considerar cuando hablamos de la bajada de una cortina cortafuego por gravedad y es la velocidad de la bajada. En este sentido, la mayoría de cortinas cortafuegos textiles del mercado presentan un sistema de bajada por gravedad a velocidad no controlada cuando no disponen de ningún tipo de suministro eléctrico (ni principal ni secundario).
Esto supone un gran riesgo de aplastamiento para cualquier persona que pudiese pasar por debajo de la cortina en el momento del desplome de la misma. Este riesgo de impacto por aplastamiento es uno de los requerimientos de seguridad que se establece en las normas UNE EN 12453 y UNE EN 12445.
Además, el impacto de la cortina en el pavimento puede ocasionar una serie de daños y la posibilidad de descuadre y salida de las guías, cosa que estaría imposibilitando la sectorización y por tanto haría que el fuego y los gases producidos por el incendio se propagasen de un sector de incendio a otro.
Es por ello que las cortinas corta fuego textiles INTISI 7 han sido dotadas de tecnología ISF que asegura la bajada de las mismas a una velocidad controlada, aún por fallo de cualquier tipo de suministro eléctrico. Es el propio tambor tubular que contiene el motor quien se encarga de ello generando en el momento de la bajada en caso de incendio la energía suficiente como para frenar esa bajada y por tanto evitar que se produzcan los daños y peligros citados anteriormente, siendo un sistema totalmente seguro y fiable.
Buenos días, más que un comentario es una pregunta:
Como expertos en la materia, y dado que no dispongo de demasiada información al respecto, ¿podrían indicarme si existe alguna norma que nos indique la altura maxima a la que debe bajar una cortina de sectorización de humos, de forma tal que evite tropiezos o golpes sobre las personas, tras su caida, ante una hipotética evacuacion del sector de incendios que protege.
Muchas gracias y saludos cordiales.
Buenos días Francisco,
Las cortinas de sectorización de humos están reguladas por la norma UNE EN 12101-1 , entendemos que su pregunta se refiere a cortinas de humos activas o automáticas , este tipo de cortinas de humos se categorizan por ASB1,ASB2,ASB3 y ASB4 , las de categoría ASB1 y ASB2 siempre han de quedar a 2,5 mts de altura desde nivel del suelo , las de categoría ASB3 y ASB4 pueden desplegarse a cualquier altura , en estas situaciones la velocidad de bajada deben estar comprendidas entre 0,06 m/s y 0,15 m/s.
Otro punto muy importante en las cortinas de humos que pueden desplegarse a cualquier altura, es que ante un fallo del suministro eléctrico principal y baterías de emergencia las cortinas de humos bajaran a velocidad controlada, impidiendo el posible golpe de impacto ante el paso de las personas.
La propia norma nos indica en el punto 3.1.11 sobre aplicación de seguridad de vida, el siguiente redactado, la aplicación del sistema de control de humos y calor en su condición de funcionamiento de incendio para el periodo de tiempo requerido para que los ocupantes del local sean alertados, y sean capaces de salir del local, con el sistema de control de humos y calor ayudándoles en la protección contra incendios.
Un saludo